El otro día detenían a Pernando Barrena, miembro de la Mesa Nacional de la ilegalizada Batasuna. Bien, no es que tenga la intención de comentar este suceso, sino un poco lo que ha rodeado esta noticia o noticias como esta.
El 4 de febrero, lunes, éste hombre era detenido y yo me enteraba de este hecho por “La mirada crítica” de Telecinco. A día de hoy no sé por qué pico siempre y pongo ese programa para desayunar, pero aguanté realmente poco viéndolo. Resulta que, al comentar tal detención, el presentador de este programa dijo textualmente: “en su domicilio hallaron, entre otras cosas, un cuadro con el anagrama de E.T.A… [y añadió] Para qué más pruebas…”.
Bueno nadie de esa mesa de “análisis” que tienen todas las mañanas se dignó a decir ni media por esta LAMENTABLE frase o declaración de opinión. En fin, no es la primera vez que ese presentador suelta una perla como esta, aunque de tal calibre al menos no acostumbra tanto. Todavía recuerdo cuando entrevistó en ese espacio a Isabel Allende, la hija de Salvador Allende como todo el mundo sabe. Aquí nuestro presentador mostró su falta de documentación al preguntarle cómo se había enterado de la muerte de su padre…
Bueno sólo decir que podría quizás haberse informado un poco más y entonces habría sabido que la familia del presidente chileno estuvo en el Palacio de la Moneda hasta diez minutos antes del bombardeo del edificio. Momento en que todo el mundo supuso que Allende habría muerto.
No es ya mi intención meterme con este periodista, sino con el gremio en general. La parcialidad informativa en este país es cada vez más lamentable, pero lo es aquí y en todo el entorno de nuestro llamado “primer mundo”. No hay más que ver la pluralidad informativa de que hacen gala los medios tipo el ya citado para darnos cuenta de este hecho. Los llamados analistas políticos —esa gente que sabe y opina de todo, absolutamente todo, lo humano y lo divino como si de todo supieran— en lo único que se distinguen unos de otros es en su adscripción a una de las dos alas políticas que se pretenden imponer —y que se imponen— en este país. Así, o se es un “progresista” más o menos vinculado al PSOE o un conservador alineado al PP.
Comentarios igual, o similarmente desafortunados como el ya mentado, se suceden casi a diario en todos los medios. Incluso los meditados que no tienen pretensión de serlo. Hasta hace relativamente poco tiempo —no sé si lo seguirán haciendo— en Cuatro, los informativos cubrían la información de la Franja de Gaza y criticaban abiertamente la política israelí en la zona. Hasta aquí todo bien pero, ¿por qué no se hizo antes? ¿o es que antes de esto no había crisis en Gaza?
En pos de eso que llaman objetividad informativa los periodistas —especialmente los occidentales u occidentalistas— consideran lo correcto dar iguales dosis de información tanto por el lado israelí como por el palestino. Hamás lanza misiles Kassam contra Israel y éstos responden con una acción militar; no se necesita más, la información ha sido cubierta, sin parcialismos. También en esta cadena, hace ya un par de años creo, el presentador del informativo del mediodía anunciaba para el jolgorio general de la ciudadanía española que ya no había hambre —si mal no recuerdo— en Etiopía y todo gracias a una partida “humanitaria” lanzada desde la UE.
Bien, supongo que poca gente sabría de la existencia de tal hambruna, o de que fuese ésta merecedora de tal atención y atenciones ya que, al ser África, se da por supuesto que había de haberla.
La noticia era feliz, por lo que todos debíamos congratularnos de haber ayudado, sin haber hecho, de paso, realmente nada, por erradicarla. ¿Para qué preguntarse o cuestionarse tal acontecimiento? Se ha solucionado y punto. A nadie le importa que Etiopía sea el país con la mayor crisis humanitaria del mundo y menos aún si encima ya ha sido solucionada… porque el anuncio era rotundo; el titular rezaba “ya no hay hambre en Etiopía”, sin puntualizaciones tipo: “al menos en unos días…”.
El problema realmente es cómo saber de esto a través de los medios, ¿es que acaso figuraba Etiopía, o África en general, en los informativos nacionales? Efectivamente hay que decir que no se le da mucha cobertura.
Que nadie se preocupe, no hay razón a porqué hacerlo. En el mundo hay problemas, está claro, pero poco a poco Europa los va solucionando y así el mundo avanza, gracias a la aportación caritativa desinteresada de nuestro Primer Mundo —de quién sino— y a nadie le importa por qué maldita casualidad o azar del Destino somos los más ricos. Simplemente esto es así. Pensarlo puede ser demasiado trabajoso supongo. No suele figurar en los “informativos” que, paradójicamente, nunca ha habido tantas desigualdades ni tantas ONG´s funcionando. Por cierto que, hace pocos días, intervinieron las cuentas de Intervida.
El mundo, en fin, no es perfecto pero desde estas latitudes hacemos lo que podemos porque ¿hay acaso alguna razón para cuestionarse las fórmulas del desarrollo? Afortunadamente, podemos dormir con la conciencia tranquila, porque más no podemos hacer y porque, en realidad, no pasa nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario