Copio a continuación, un artículo aparecido hoy jueves 2 de agosto en Público, que descubre que el accidente de tráfico en el que murió el disidente Oswaldo Payá viajando junto con el presidente de NNGG (juventudes del PP) de España y su homólogo sueco, era en realidad parte de un ritual regular de financiación de la disidencia anticastrista en la isla.
La participación de extranjeros en la política cubana parece mostrar
que derecha mundial está perdiendo la paciencia con los cubanos que no
se deciden a iniciar su “primavera árabe”. Líderes políticos suecos,
españoles y activistas mexicanos están siendo enviados para promover un
levantamiento contra el gobierno.
El secretario general de las
juventudes democratacristianas de Suecia, Jens Aron Modig y el dirigente
de las Nuevas Generaciones del Partido Popular de España, Angel
Carromero, revelaron que fueron enviados a Cuba a organizar y financiar
grupos opositores. El sueco aseguró a la prensa extranjera que no sabía que era ilegal hacer tal cosa pero confesó que en el único país del mundo donde lo hacen es en Cuba.
El envió de dinero e instrucciones de Suecia a la oposición cubana
no es nuevo. El disidente Manuel Cuesta Muroa dijo a Público que, antes
de Modig, vino varias veces a Cuba con la misma tarea la sueca Annita
Ardin, la misma que ahora acusa de violación a Julián Assange, el
director de Wikileaks. Según el opositor cubano, entraron en conflicto
porque ella quería que sus instrucciones se cumplieran al pie de la
letra.
Los dos europeos participantes en el accidente dijeron que
fueron enviados juntos en una operación coordinada por las direcciones
de sus respectivos partidos, que su misión fue entregar a Oswaldo Payá
4.000 euros, acompañarlo en un viaje por la isla para promover la
disidencia y reunirse con su hija para asesorarla en la formación de
organizaciones políticas juveniles opositoras al gobierno cubanos.
Carromero
conducía el automóvil en el que murió el líder opositor cubano Oswaldo
Payá y su compañero Harold Cepero. Tanto el español como el sueco
confirmaron que se trató de un accidente, descartando todas las
especulaciones de los blogueros disidentes sobre un asesinato
premeditado de las autoridades cubanas.
Oficiosamente, un
funcionario cubano dijo a Público que “Cuba no aplica la pena de muerte
extrajudicial; pero incluso es una tontería pensar que vamos a esperar a
que Payá esté con dos extranjeros para matarlo y además dejar a los
extranjero vivos para que declaren lo ocurrido. Seríamos tontos además
de inmorales”.
Contratados por el exilio en Miami
La
participación extranjera no parece ser un hecho aislado. La TV cubana
presentó esta semana las declaraciones de varios jóvenes mexicanos
enviados a Cuba para promover protestas durante la visita del Papa
Benedicto XVI. Traían celulares para los grupos disidentes que se
tomaron varias iglesias y octavillas anticastristas para tirar por la
madrugada en las principales arterias de La Habana. Los chicos fueron
contratados por organizaciones del exilio de Miami que les pagaron todos
los gastos y les dieron 1.000 dólares (unos 812 euros) a cada uno. Tras
su captura e interrogatorio las autoridades cubanas optaron por
deportarlos. Algo similar a lo ocurrido con el sueco Modig que ya se
encuentra en su país de vuelta.
El destino del español Angel Carromero será diferente porque es el
responsable del accidente de circulación y deberá ser juzgado por los
homicidios de los disidentes Oswaldo Payá y Harold Cepero, según
establecen las leyes cubanas. De ser encontrado culpable, la condena
para este tipo de delito es de 1 a 10 años y se cumple en centros de
mínima rigurosidad, por lo general pintando calles o fabricando señales
de tránsito.
La paradoja del accionar de la derecha española en
Cuba es que consigue los resultados exactamente contrarios a los
esperados. El canciller Roberto Robaina pierde su cargo por asesorar más
de la cuenta a su homólogo español. Su sustituto, Felipe Pérez Roque,
el vicepresidente Carlos Lage y otros altos dirigentes del Partido
fueron destituidos gracias a conversaciones grabadas por los servicios
de inteligencia de la Madre Patria. Y ahora matan accidentalmente al
principal y más influyente líder de la oposición.